El cofundador de la farmacéutica alemana confirma que se precisará una tercera dosis «a los 9 meses, y después, otro cada año o cada 18 meses».
En un encuentro virtual con representantes de medios extranjeros en Alemania, ha recordado, además, que a los seis meses de haberse logrado esa máxima inmunidad, a través de la segunda dosis, ésta empieza a descender. De acuerdo a sus estimaciones actuales, ello implicaría que, entre los nueve meses y el año siguiente probablemente deberá inyectarse una tercera, para garantizar el mantenimiento de la máxima inmunidad.
El científico turco se ha mostrado confiado en que la vacuna desarrollada por su laboratorio y distribuida junto a su socio estadounidense Pfizer sea «efectiva» también contra la variante india.
«Nuestro método se basa en las experiencias adquiridas contra el cáncer. Experimentamos con muchas variantes y, hasta ahora, en todas hemos logrado buenos resultados», ha indicado Sahin. «Confío en que obtendremos también buenos resultados frente a la variante india», ha añadido, respecto a esta mutación mucho más agresiva que las anteriormente detectadas.
Hasta ahora, ha insistido, su vacuna había mostrado su efectividad «en prácticamente todas» las mutaciones conocidas.
Sahin se ha mostrado cauteloso en lo que respecta a la liberación de restricciones para los vacunados. Está claro que ésta va a producirse, ya que «todos esperamos recuperar la normalidad», pero debe evitarse caer en «discriminaciones» entre ciudadanos inmunizados y los que no lo están. «Hay que ser muy precavido y no caer en la llamada ‘cultura de la envidia'», aconsejó.